En el capitulo de ayer de House vivi una de las manifestaciones de amor ( y cuando hablo de amor lo hago desde la plenitud de la palabra en todas sus variantes) mas grande que he visto jamas. El arisco doctor prometia a una de las mujeres de su vida que cuando llegara el momento, el se haria cargo de su muerte ( para quien no siga la serie,cosa que me parece un delito, dicha mujer sufre una enfermedad degenerativa de la cual no existe cura). Mas tarde,mi querido enemigo intimo ,leyendome el pensamiento para variar, me tranquilizaba diciendome que si algun dia me encontraba en ese trance,el se haria cargo de que tuviera una muerte digna.
Nadie cuestiona la importancia de un buen nacimiento.Durante la gestacion nos preocupamos de tener una buena asistencia al parto, utilizamos epidurales contra el dolor y mimamos a la futura madre para que este tranquila llegado el gran momento. Por el contrario,nunca nos planteamos si seriamos capaces de matar a las personas que mas amamos.Nos han educado para alargar la vida al precio que sea,independientemente de la calidad de vida que se tenga ( o la ausencia de ella). Quizas el hecho de que en nuestro pais la eutanasia esta penalizada con la carcel haga que, hoy en dia , tener una muerte digna sea una utopia.
Ramona Maneiro espero a que prescribiera el caso de la muerte de Ramon Sanpedro para confesar que fue ella quien asistio al tetraplejico en su muerte.Si hubiera confesado antes se la hubiera juzgado por asesinato. Lo que nunca se hubiera juzgado es el esfuerzo titanico que debe suponer ver morir a la persona querida, anteponer su decision de marchar al egoismo propio de tenerlo junto a ti.
Yo ,que para los mios soy muy cobarde,no seria capaz de matar con mis propias manos pero si que buscaria quien lo hiciera,por mucho que me doliera,aunque fuera yo quien muriera en el intento.Y llegado el momento,tomaria su mano y como bien me decian ayer, estaria hasta el ultimo momento,hasta el ultimo segundo.
El amor de los nuestros es el bien mas preciado de nuestra vida,tanto que hasta en los momentos mas extremos somos capaces de matar o morir por ellos.
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