Buscame en San Junipero

No conozco a ningún serieadicto que no haya pasado en alguna ocasión por Black Mirror. Y digo pasar porque para quedarse hay que tener buenos arrestos. Sumergirse en los siete reinos de Juego de Tronos ,con sus escudos, sus paisajes,sus desnudos de Jon Nieve es maravilloso, intentar desmembrar los entresijos de House of Cards puede hacerte entender muchas de las cosas que pasan en el mundo, pero ser testigo de  como el primer ministro de Inglaterra sodomiza a un cerdo mientras se emite en Prime Time es ,cuanto menos, incomodo, si ademas , te recuerda que tu enfermizo enganche a las RRSS puede condicionar tu futuro social, cierras filas y te dejas abrazar por el cálido y mullido Asperger de Sheldon Cooper.

Pero, de repente, llega el cuarto capítulo de la tercera temporada y en poco más de una hora te reconcilias con la vida en general y con Black Mirror en particular. San Junipero, ganador del Emmy 2017 como mejor capítulo de serie de televisión, cuenta la historia de amor entre una mujer negra y una rubia casi aria enmarcada en una ciudad en la que siempre es sábado noche. Se podría decir que San Junipero es un grito a la libertad sexual y a la interracialidad, pero pensar eso seria quedarse en una superficie muy mediocre y vacía, demasiado trillada.Y es que a los diez minutos te olvidas de que las protagonistas son dos mujeres y simplemente te zambulles en una de las historias mas bonitas que nos ha podido dar la pequeña pantalla. Un amor real con miedos letales, con historias pasadas y pesadas, con heridas personales difíciles de cicatrizar. Un historia real que opta por el lema mas sencillo y efectivo en toda gran historia de amor ; lo hacemos y ya vamos viendo. Nos conocemos y vamos viendo, nos miramos, nos vemos y vamos viendo, nos besamos,nos amamos y vamos viendo, bailamos y vamos viendo. Una historia de amor donde siempre es sábado noche.

Pero San Junipero es mas que una historia de amor, es mucho mas . San Junipero es toda una declaración de intenciones , una actitud vital frente a la realidad, es la capacidad de ser resilente ante situaciones abrumadoras, una decision personal e intrasferible. El fantástico empoderamiento de los que creemos en una metarealidad posible, un sabado por la noche constante , en la que todo humano decide la banda sonora de su vida, su lugar en el mundo, a quien coger de la mano , con quien compartir las copas. Es respirar, sonreir , hacer e ir viendo.

Gracias Black Mirror por regalarnos un lugar donde poder viajar sin moverte del sofa, por permitirnos vivir la gran historia de amor que cualquiera mataría por tener, por recordarnos en momentos en los que la fe en la humanidad es muy débil que siempre existirá un San Junipero donde ser feliz.