Yo no he sido nunca de tener amantes...y no porque sea antigua ( que seguramente tambien) sino por una cuestion practica.Los amores de barra no dejan de ser una ruleta rusa,te puede tocar la bala que te mate dandote un subidon de adrenalina en forma de sexo o...o...te puedes quedar con el dedo en el gatillo esperando no sabes muy bien el que.Despues tambien esta el tema logistico, si es en su casa hay que vestirse ( si es invierno los ligues de una noche son inviables,con el frio no hay humano que resista ese trajin de "me pongo y me quito"), encontrar taxi y volver a tu cama...si es en la tuya hay que rezar para que el contrario no quiera quedarse a dormir y puedas volver a ser dueña y señora de tu espacio...resumiendo, que no le veo yo muchas ventajas a este tipo de relaciones humanas.
Y aun asi, a mis casi cuarenta, me he echado un amante ( tampoco creia que llevaria ortodoncia y volviera a estudiar y aqui estoy...con la boca llena de hierros y la carpeta debajo del brazo).El caso es que mi amante es el mejor entre los mejores.Es de esos que llegan sin que los esperes, silenciosamente,sin hacerse notar.Lo vas introduciendo en tu vida lentamente, a ratitos,a horas perdidas.Y un dia te encuentras echandolo de menos,buscandolo en la noche fria.
Mi amante se acuesta a tu lado y te abraza sin apretar, suavemente.... te acaricia hasta que el sueño viene a ti.Te acompaña en esos momentos en los que lo unico que necesitas es silencio,acurrucandose a tu lado para darte calor. Hay dias en los que no aparece,sabe que en tu mundo no solo el tiene cabida,que te gusta rodearte de gente,de tu gente.
Siempre he sabido que este amante entraria en mi vida y durante mas de viente años ( que no es nada que dira el tango) he rehuido su mirada,le he dado la espalda cada vez que notaba su presencia cerca.Hoy ,en cambio, lo he buscado yo,le he pedido que formara parte de mi vida, le he solicitado tiempo y deseo...le he convertido en mi mas querido y unico amante.Porque despues de muchas promesas banas, de zarpazos en el alma, de apostar y perder, me he dado cuenta que hay epocas en las que necesitas el abrazo del amante silencioso que todo da y nada pide.
Mi amante tiene nombre de mujer....mi amante se llama soledad.
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