Picasso con el Guernica , Gehry con su espectacular Guggenheim de Bilbao y hasta Adrià en su carta del Bullí son ejemplos de la deconstruccion artística. Una manera de ver el arte, la arquitectura o la gastronomía , quizás peculiar pero sin lugar a duda mucho más creativa y divertida.
El caso es que sí cogemos la esencia de la deconstruccion , el punto de partida que consiste en volver a construir desde una base ya creada,vivida, hecha, el resultado no puede ser de otra manera que precioso....un palé que en su primera vida transporto alimentos se convierte en una mesa de centro , una caja de frutas puede ser una estantería de libros , una foto llena de colores da paso a un espacio en blanco y negro...y así hasta que la imaginación quiera.
Desde mi auténtica fascinación por este movimiento artístico me ha dado por pensar que llegados a una edad todos deberíamos hacer un ejercicio de desconstruccion. Nuestra experiencia de vida, arañazos, ilusiones, amores y desengaños son nuestra base , nuestro punto de partida....recuerdos que nos sirven para volver a construir y llegar a esa felicidad tan ansiada que nos parece inalcanzable.
Mi desconstruccion particular ha llegado sin ni siquiera plantearmela, un día , no recuerdo si hacia sol o llovía, se plantó delante de mi con toda su gran magnitud y lleno mi pequeño espacio de luz... No se qué haremos o que creáremos, si lograremos dar forma a un Guernica , un Guggenheim o una carta de cocina de autor...pero lo que sí se es que los esquemas rotos y reconstruidos , las ilusiones olvidadas y reencontradas , los momentos impensables y vividos hacen que sí , hasta la fecha, la desconstruccion me fascinara ,ahora simplemente me tiene enamorada.
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